Les propongo un ejercicio, antes de sumergirnos en la reseña ¿Qué es lo primero que se les ocurre cuando piensan en los Assassin’s Creed? En mi caso, lo primero que se me viene a la mente son asesinatos silenciosos, movimientos sigilosos, ambientación increíble y una buena historia que acompaña.
Bueno, olvídense de eso, ya que desde el primer momento nos vamos a dar cuenta de que la famosa renovación de la que se viene hablando hace varios años, llegó. Y espero que para quedarse. Aunque tranquilos, porque el juego aún conserva algunas tradiciones.
En esta oportunidad Ubisoft Québec nos invita a visitar la antigua Grecia durante la guerra del Peloponeso allá por el año 431 AC. Lo que nos queda clarísimo desde el arranque, donde nos ponen cientos de enemigos por delante y espartanos a nuestro lado. ¿Sigilo y asesinatos silenciosos? ¡La verdad que nada… y me encanta!
Una vez que termina la batalla en honor a 300, pasamos a la selección de personajes.
Assassin’s Creed Odyssey es el primer juego de la franquicia que nos deja elegir el género de nuestro asesino. Podemos optar por Kassandra o Alexios, siendo la mujer la versión canónica de la historia. Aunque según contó Jonathan Dumont, director del juego, no hay malas o buenas decisiones, por lo que nuestra elección no nos hará perder de nada.
Al igual que Origins, este es un RPG de acción que toma elementos de otros grandes títulos de la franquicia. Como las peleas de barcos del Assassin’s Creed Black Flag, las mecánicas de The Witcher 3 e incluso la libertad de movimiento del Zelda Breath of the Wild. Una combinación de factores que logró atraparme como hacía mucho no me pasaba con una entrega de la saga.
Las primeras horas nos cuentan cómo nuestro personaje fue dado por muerto cuando era joven. Pero Markos, un simpático y charlatán comerciante, nos rescató y nos convirtió en un “Misthios” (Mercenario/Asalariado).
Cuando pensamos en tragedias griegas, se nos viene a la mente Edipo matando a su padre, acostándose con su madre y sacándose los ojos ante el horror de lo que cometió. Bueno, no les voy a spoilear nada, pero si les voy a decir que Ubisoft logró convertir Assassin’s Creed Odyssey en una.
La historia es realmente muy buena y le hace honor a la temática. A medida que avancemos vamos a encontrar todos los elementos de las tragedias griegas tradicionales en nuestra aventura. Dramas familiares, traiciones y venganza. Todo tiene un tono épico con personajes fuertes y dioses marcando nuestro camino. Además, la estética y la parte visual es realmente hermosa, por lo que el juego tiene todos los elementos para que nos sumerjamos de lleno en esta nueva entrega.
El nuevo mundo que nos presentan es un sandbox enorme y tenemos muchas regiones y lugares para explorar. Mi miedo cuando se introducen estos mundos tan grandes siempre es ¿cómo nos vamos a mover de un lugar al otro? Aunque, por suerte, lo resolvió perfectamente.
Además de los barcos y los puntos de teletrasportación, se suma la mecánica del caballo que debutó en Origins. Que nos daba la posibilidad de ponerlo en automático para que nos lleve solo donde queremos ir. Lo que nos permite soltar el control y publicar fotitos en las redes sociales de PressOver.
Como mencionamos antes, Assassin’s Creed Odyssey es un RPG de acción con todos los elementos tradicionales. Por lo que podemos customizar nuestro personaje y elegir entre tres grandes ramas: asesino, guerrero y cazador. Cada familia tendrá un set de habilidades específicas y una serie de armas que las potenciarán, pudiendo elegir nuestra forma de juego basándonos en las mismas. Hay varias opciones, pero tal vez no las necesarias como para evitarnos cambiar de un estilo al otro de forma bastante sencilla.
En la guerra del Peloponeso, Esparta y Atenas luchan para ver quién controlará el mundo y nuestro trabajo es ayudar a que nuestro equipo sea el triunfador.
Una parte fundamental del juego es debilitar al ejercito enemigo. Destruyendo sus provisiones, matando a sus generales y saqueando sus tesoros. Cayendo, así, en una de las tradiciones de la saga. Que esta vez terminarán en una guerra que evidencia una de las principales fallas del título: El sistema de pelea.
Cientos de soldados aliados y enemigos se enfrentan en un campo de batalla y nuestro objetivo es eliminar a los generales rivales. Acá no hay sigilo, no hay asesinato planeado, no hay nada más que una enorme guerra. ¡¡¡Esto es Esparta!!!!!
Lamentablemente la jugabilidad en estos momentos, y de todos los momentos de lucha cuerpo a cuerpo en general, es mala. No son fluidas, no tienen buen ritmo y con el tiempo se vuelven sistemáticas y repetitivas. Un problema heredado directamente de Assasin’s Creed Origins y que todavía no lograron mejorar. Y creo que tiene que ver con la elección de botones. Los golpes fuertes y débiles se hacen con R2 y R1, mientras que los “especiales” con L1 + otro botón. Algo super incómodo que le resta a la experiencia.
En conclusión, creo que el estudio canadiense, en líneas generales y a pesar de las falencias marcadas, resolvió bien la temática griega. Desde el anuncio de la llegada del nuevo juego dude si habría lugar para un asesino en Esparta. Con la incorporación de las guerras y la muy buena ambientación, lograron un título muy balanceado que no va a defraudar a los fieles seguidores de la saga y que incluso, puede llegar a atraer a jugadores nuevos.
Assassin’s Creed Odyssey arrastra algunos defectos de su predecesor, pero también añade nuevos elementos muy interesantes. Falta pulir algunos detalles, pero la renovación se siente y creo que tiene mucho futuro…
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Desarrollador: Ubisoft Québec
Lanzamiento: 2 de octubre de 2018.
Plataformas: PS4 – Xbox One – PC.
¿En Español?: Sí.
Fuente: Copia adquirida gracias a Ubisoft Latinoamérica (PS4).