El frío ya llegó. El hambre abunda y la comida escasea. Un ataque zombie resulta, a estas alturas, inminente. Pero dejando un poco de lado el tema del Coronavirus, hablemos de algún que otro juego. O podemos mechar algún que otro zombie, total ya es hora de que en esta columna hablemos de juegos cooperativos.
Sí, me imagino que se darán cuenta qué significa un juego cooperativo… que los jugadores en vez de competir…cooperan. Pero se sorprenderían. Dead of Winter es un juego que, primero y principal, nos entra por los ojos pero, casi al mismo tiempo, por la temática.
Aquellos que, como buenos ciudadanos, seguimos fielmente el document… digo la serie Walking Dead, tenemos casi el 80% del juego adentro. Incluso, la premisa pareciera situarnos dentro de la tercera temporada de la serie basada en el cómic de Robert Kirkman. Lideramos un pequeño grupo de supervivientes en un escenario de apocalipsis zombie que, para paliar el invierno, se reúne con otros pensando que la seguridad y el resguardo se encuentra en los números.
El problema es que por más de que vayamos a buscar chocolates todos los días, que limpiemos y cuidemos el perímetro de nuestra base y mantengamos a todos felices, no es suficiente.
Un gran número de personas también significa un gran número de bocas por alimentar. Tener a los niños entretenidos jugando a la play, implica conseguir nafta para los generadores. Y en este escenario los zombies no son la peor amenaza: el frío y la escasez son igual de malos.
Dead of Winter nos propone dos cosas. Por un lado cumplir el objetivo general, el de sobrevivir. Y por el otro cumplir los objetivos de nuestro grupo dentro del grupo más grande. Sino perdemos el juego.
El grupo de Berta quizás esté interesado en conseguir muchas balas y armas para una vez terminado el invierno dirigirse al norte. La de Chuco López, tal vez, entienda que lo mejor es hacerse con un par de rodajas de salame extra para mantener a su muchachada contenta. O nostros pensemos que es menester seducir a los integrantes del resto de las comunidades para tener el grupo más grande terminado el invierno. Por lo que, como les anticipé, el juego puede que sea menos cooperativo de lo que aparenta.
Para colmo, también podemos ir por misiones egoístas y decidir huir con todos los víveres que hemos estado recolectando. Una traición ni siquiera necesita ser demasiado obvia en un escenario tan desolador. Quizás ”pifie” un tiro que nos hubiese salvado de un ataque zombie. Quizás deje una puerta abierta… “ups”.
Es decir que dentro de los jugadores puede, lisa y llanamente, haber un traidor cuyo principal objetivo es que todo el resto de los jugadores mueran. Hermoso, esto casi que nos enfrenta nuevamente a la secundaria.
La gracia de Dead of Winter está en que también puede no haber ningún traidor, y la posibilidad de exiliar a un grupo fuera de la base está presente constantemente. Una suerte del juego de cartas Mafia, pero con zombies. Los jugadores intentarán continuamente demostrar que no son traidores, dado que dormir a la intemperie incrementa la dificultad del juego enormemente. Claro, porque una de las opciones que tienen los jugadores es exiliar a un grupo del cual desconfían.
Como se podrán imaginar, no escasean oportunidades para que reine la confusión, la interpretación y la duda. La colaboración es obligatoria para la supervivencia. El “cómo” es lo que debe ser resuelto.
Más allá de la hermosura de los componentes y de un fuerte costado narrativo, el juego brilla por la efectividad de transmitirnos la temática: estamos encerrados, rodeados por el frío y zombies, y cabe la posibilidad de que uno de mis “amigos” sea un traidor… Y que encima esté intentando matarnos a todos.
Un juego que quizás abrume, en un comienzo, a aquellos que lo último que jugaron fue el Juego de la Oca, pero que promete y garantiza una experiencia distinta a todo lo que están acostumbrados. Donde cada decisión conlleva un riesgo considerable, pero que debe ser afrontado.
No sería mala idea haber pasado previamente por algún que otro juego “bisagra” antes de cazar este porque, no les voy a mentir, Dead of Winter es difícil.