Es curioso cómo una serie se reinventa a lo largo de los años. Muy alejado de lo que comenzó siendo hace 30 años, The Legend of Zelda hoy es un juego 3D donde corremos en calzones prendiendo fuego todo. ¿Qué nos queda a quienes buscamos recuperar la magia de las entregas anteriores? Por suerte, videojuegos como The Swords of Ditto están dispuestos a aceptar la responsabilidad.
Un reino lleno de magia y de felicidad está siendo amenazado por la tiranía de Mormo, y sólo la Espada de Ditto puede hacerle frente. Nos toca a encarnar ese papel, juntando las armas necesarias vencerla antes que se cumpla el límite de cuatro días y debamos volver a intentarlo.
Lo que propone es una vuelta de tuerca hermosa, como bien explica su trailer. Interpretamos al héroe principal, aventurándonos en calabozos para liberar el reino, luchando contra monstruos, lo mismo de siempre. Sólo que, en este caso, la muerte es permanente y no tiene marcha atrás.
Cada vez que seamos vencidos (y seremos vencidos), habrá que esperar cien años hasta que el próximo joven elegido tome nuestra espada y continúe con nuestra misión. En términos superficiales, Se trata de un Zelda donde volvemos a comenzar desde el principio cada vez que morimos.
Y la Espada de Ditto puede tomar cualquier forma. A veces nos tocará ser una nena, a veces un nene y a veces un perro. Cada nuevo héroe despierta la comodidad de su casa y debe correr hasta la tumba del anterior para levantar su arma legendaria y convertirse en La Espada, tal como dice la leyenda.
Pero el mundo continúa avanzando en esos cien años. Todo el mapa del reino, junto a los calabozos, se reordena cada vez que volvemos a comenzar. Eso implica también volver a recolectar las herramientas y mejorar las armas que llevamos con nosotros. Es un concepto bastante simple que juega un poco con la idea de «El Elegido» que debe salvar al mundo, inyectando también algunos elementos de rogue-like.
No puede discutirse que se trata de un juego visualmente hermoso, muy al estilo de Cartoon Network, con ojos como los de Steven Universe. También, al igual que en Adventure Time, existe esta conjugación entre reino de fantasía con un mundo real en el futuro. Donde un negocio atendido por un sapo puede convivir con un mensaje contra la contaminación ambiental o con una carretera abandonada.
Al igual que esas series animadas, logra cumplir con un público mixto, de niños y de adultos. Después de todo, el juego llama «juguetes» a sus armas, y nos permite agregarles stickers para mejorarlas.
Ahora sí, más allá de la propuesta estética, es posible que esté pensado desde el principio con un público infantil en mente. La posibilidad de participar con dos jugadores a la vez lo convierte en el escenario ideal para las locuras compartidas, algo ideal para compartir en familia.
La oportunidad de recorrer un mundo nuevo cada vez, donde la exploración es lo que más recompensa trae, se convierte en un atractivo muy marcado a la hora de elegir una aventura. En el último año aprendimos con Breath of the Wild que el descubrimiento es lo que atrapa a los jugadores más jóvenes, y The Sword of Ditto estuvo prestando atención en clase. Tener que recorrer un mapa nuevo cada vez es la oportunidad perfecta para aplicarlo.
La comparación con las entregas clásicas de The Legend of Zelda es inevitable. Después de todo, es la inspiración principal. Las referencias están ahí, de forma muy clara. En las armas y en la forma de jugar, pero también en cómo logra capturar la esencia que caracteriza a la saga desde sus orígenes. Aunque no podamos correr en calzones acá, los pastos sí son víctimas de nuestros incendios.
Otro factor que comparten es la dificultad. O, por lo menos, lo que percibimos como dificultad. Dentro del juego, la muerte es algo a los que nos acostumbramos y que no permitimos que nos detenga. Se incorpora como parte de la naturaleza, sin convertirse en sinónimo de fracaso, sino de aprendizaje. Pero difícil, es difícil.
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Tal vez lo más sorprendente es el detrás de las escenas. Está desarrollado por OneBitBeyond y distribuido por Devolver Digital. Ese mismo publisher lanzó Minit a principio de mes, un juego muy inspirado en los Zelda clásicos, donde debemos juntar herramientas y resolver puzzles 60 segundos a la vez. Con cada intento, dejamos el escenario preparado para la próxima vez llegar un poco más lejos.
Aunque Minit no cuente con el mismo impacto visual, sí consigue abordar un concepto similar de una forma mucho más simple y directa. Y no puedo dejar de pensar en lo que se debe haber cruzado por la cabeza de Devolver para aprobar ambos juegos, tan cerca el uno del otro.
Hay muchos éxitos dentro de The Swords of Ditto, y sin embargo logra más que nada traer a nuestras mentes juegos mejores. El límite de tiempo de Majora’s Mask, los héroes que continúan nuestra misión de Rogue Legacy, la comedia de Ittle Dew. Y es muy poco lo que aporta por sí mismo.
Estoy seguro que puede convertirse en un fin de semana divertido para cualquier pareja con dos joysticks, pero realmente dudo que lo recordemos dentro de un año.
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Desarrollador: OneBitBeyond
Lanzamiento: 24 de abril de 2018
Plataformas: Steam – PS4
¿En Español?: Sí
Fuente: Copia adquirida gracias a Devolver Digital.