Cada fin de año, es tradición que nosotros los seres humanos nos pongamos metas a cumplir el año próximo. El minúsculo cambio de un número y reseteo del calendario parece significar un enorme trastorno de paradigmas.
En ese fin, y dado que no pienso cambiar nada (¿?), exijo, no, mejor dicho DEMANDO. Bueno, en realidad apenas deseo, que en el universo gamer sucedan estas cinco pequeñas cosas:
Que Steam mantenga precios regionales
No hay nada que indique a priori que Steam vaya a redolarizar su store nacional. NADA. Sin embargo, cada SALE y cada oferta (y Steam las tiene de a decenas durante el año con las sales de verano, invierno, pascua, Halloween, aniversarios…) en nuestra Store aparecen videojuegos triple “A” a precios tan irrisorios e inentendibles que deberían sonar un montón de alarmas.
Estos precios han generado que usuarios de Steam alrededor del mundo, avivados de la secuencia, utilicen diferentes métodos para comprar vía nuestra store. Imagínense comprar un videojuego a 0,30 centavos de dólar. Cuando Steam se enteró de la trampa, incluyó medidas de control. Sin embargo, como todo, se puede eludir. Y si compradores alrededor del mundo siguen encontrando formas de evadir los controles, es solo sensato pensar que Steam puede dar de baja la regionalización de precios.
Que se regularice el stock de PS5 para suplir la demanda y que se acomode el precio
El proceso de venta de la PS5 fue y es un papelón. Sony inició preventas sin tener garantizado el stock y aún hoy, a cuatro meses de su fecha de salida, no hay PS5 en las grandes cadenas. Esto genera varias cosas: se revalorizan consolas de generaciones anteriores. La PS4 se vende en nuestro país a 60 mil pesos y la PS3 a 25. Un disparate ocasionado por la inflación, la especulación y la falta de control en ítems específicos.
Cuando Sony se ponga al día, esperemos que suceda en lo momentáneo, las grandes cadenas electrónicas van a tener que adecuar los precios a la demanda o arriesgarse a hacer una inversión (en dólares) que sea desastrosa para las finanzas. Hoy, con el hype, el exceso de demanda y la falta de oferta, hay dementes (tengo otra palabra en el teclado pero me contengo porque este es un espacio familiar) vendiendo la consola a 250 mil pesos cuando vale 400/500 dólares que es un quinto de ese valor.
Que la E3 vuelva a ser relevante
La E3 se murió. Las empresas ya no intentan superarse en las presentaciones. A veces, como Nintendo y Sony, ni siquiera hacen una. Se limitan a poner un reel grabado con alguna presentación y listo. Esto es porque tanto la empresa de Mario como la de Nathan Drake, tienen sus convenciones y presentaciones propias donde todo el buzz periodístico está alrededor de ellos.
Las Direct y las PS Experience, dedicadas a los gamers de cada sistema, así como las que diagraman o están diagramando diferentes distribuidoras o desarrolladoras, vaciaron de importancia la otrora gran convención de videojuegos que teníamos. Recuerdo con mucho cariño aquella E3 en la cual se rompió el universo gamer por el anuncio de la remake del Final Fantasy VII y el kickstarter de Shenmue. Añoro volver a vivir algo asi. Aunque me estén mintiendo y lo tenga claro.
Que se legitime totalmente el crossplay entre sistemas
Históricamente es Sony la mas reacia a permitir el crossplay. No obstante, desde la unión de facto de PC y XBOX, gran cantidad de videojuegos se pueden jugar entre sistemas. Luego se sumó Switch y también Android (e iOS). Finalmente Sony empezó a adoptar el sistema en juegos inmensamente populares como Apex, Fortnite, Just Dance, Minecraft. Lo hicieron en muchos casos porque financieramente no les quedó otra y decidieron que les convenía.
Lo que yo deseo es que el crossplay sea la primera decisión, la elección por defecto. Hoy por hoy es una elección porque no quedó otra. Sin embargo, diferentes capacidades económicas de los individuos no deberían prohibir que juguemos con nuestros amigos.
Que los golpazos de empresas desarrolladoras contribuyan al fin de la preventa
Por último y siguiendo un poco lo que se habló en notas anteriores sobre el hype y necesidades artificiales, la preventa es una forma muy fea que tienen las empresas desarrolladoras de refinanciar sus proyectos en base a una promesa que puede o no ser cierta. En general no lo son y terminan defraudando a su base compradora o directamente estafándola. La preventa existe en casi todas las industrias. Cuando uno compra un sofá de tres cuerpos y prometen entrega en 20 días, es porque ese sofá no existe. El que vemos en la foto puede no ser el que terminemos recibiendo.
Hay mecanismos para reclamar lo que es en definitiva un engaño y que nos devuelvan la plata. Sin embargo, cuando uno tiene una lealtad hacia una marca, casi siempre termina comiéndose el sapo y hasta forzándose a pelear con otros para defender esa lealtad. Una forma de evitar todas esas dinámicas es prohibir la preventa. Si hay lealtad con la marca que haya, pero con el producto terminado y reseñado. Que se terminen los embargos y que las desarrolladoras distribuyan keys para todos los sistemas. Que no engañen más al consumidor.
Ustedes, ¿qué desean?
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