Mientras todos y todas estábamos distraídos con la explosión de Fall Guys en agosto del año pasado, Epic Games ejecutaba una jugada que, evidentemente, se tenía preparada desde hacía un tiempo. Y que hoy, 10 meses después, terminó con un juicio de tres semanas que puede llegar a cambiar las reglas de la industria de videojuegos, e incluso de todo el universo digital, para siempre.
Servite un mate, un café o lo que quieras, pero sentate tranqui porque hay mucho para contar, aunque prometo que con las palabras más sencillas posibles.
Los meses previos al juicio
El 13 de agosto de 2020, Epic Games actualizó la versión mobile de Fortnite e incluyó una tienda interna para comprar moneda in-game (V-bucks) más barata y por fuera de la App Store y Google Play. Básicamente, dándole la opción a sus usuarios de saltearse dichas plataformas y, en consecuencia, de no pagar el porcentaje correspondiente a los de la manzanita y el buscador famoso.
Automáticamente, tanto Apple como Google, bajaron Fortnite de sus tiendas y Apple amenazó con cancelarle el certificado de desarrollador de iOS a Epic. Lo que podría haber sido un desastre sin precedentes, ya que todos los videojuegos que corrieran en Unreal Engine (motor propiedad de Epic) hubieran dejado de funcionar. Imaginate, miles y miles de devs fundidos por una pelea de titanes de la que no tenían nada que ver. Ay, hermoso sistema!
Pero Epic contraatacó. ¿Cómo? Con un video armado para burlarse de Apple y con una medida cautelar que la jueza estadounidense Yvonne González Rogers respondió positivamente.
Estaba claro, los dueños de Fortnite llevaban mucho tiempo preparando la jugada. Sino cómo habían hecho para armar un documento legal coherente y un video que imitaba una famosa publicidad de Apple en apenas unas horas. Unos loquillos.
La campaña se llamó “Nineteen Eighty-Fortnite”, haciendo un juego de palabras entre la 1984 en inglés (por la novela que inspiró a Gran Hermano) y Fortnite. El fin era reclamar la supuesta libertad de su juego bajo el hashtag #FreeFortnite. Una lucha entre gente con mucho poder y dinero en la que, obviamente, cayeron incontables fanáticos inocentes poniéndose de uno u otro lado.
La estadística de gigantes peleándose por más dinero indicaba que iba a terminar todo con un arreglo por fuera de la corte. ¡Pero no! Epic parecía dispuesta a seguir este asunto hasta las últimas consecuencias bajo la bandera de la libertad y los sistemas antimonopólicos. Sí, claro, aun cuando el 40% de sus acciones le pertenezcan a Tencent, otra empresa acusada de lo mismo.
Temitas geopolíticos
Desde la creación de Epic Games Store, la compañía lleva la bandera de los desarrolladores. Su caballito de batalla fue cobrarles solo un 12% de las regalías a los videojuegos que se publicaban en su tienda.
Pero tampoco seamos ingenuos. Detrás de todo este embrollo y, pensando ya a nivel geopolítico, también hay una lucha entre China y Estados Unidos. Los chinos detrás de Tencent compraron un buen porcentaje de Epic hace un tiempo y los videojuegos podrían ser otro de los huecos por los cuales el gigante asiático se les cuele en el mercado occidental.
Lo sé, suena conspiranoico y en una época de terraplanistas y antivacunas se complica plantear estas cosas, pero les prometo que lo que les digo tiene mucho de realidad. Y nuestro compañero Leo Di Grezia desarrolla muy bien el tema en su nota «Casillero a Casillero». Así que si quieren profundizar más sobre el asunto, vayan a leerla como complemento. Sigamos!
Un juicio para los pochoclos
El juicio arrancó los primeros días de mayo, duró tres semanas y la verdad que fueron como para comprar pochoclos (insertar imagen de Michael Jackson en el cine). ¿Por qué? Bueno, no sólo porque pudimos saber de qué forma defendieron sus posiciones ambas corporaciones, sino porque se filtraron varios documentos interesantes. Algunos, incluso, bastante lejanos en el tiempo.
Uno de los más llamativos de leer es el que compartió el periodista de The Verge, Tom Warren, donde se ve como Epic Games intenta «apretar» a Sony para que permita cross-play en su plataforma. Y el diálogo fue más o menos así:
“No se me ocurre un escenario en donde Epic no obtenga lo que quiere. No vamos a cambiar de opinión sobre el asunto, así que acordemos y ya”, fueron las palabras para con la gente de PlayStation. Luego les ofrecieron hacer el anuncio en conjunto y después dar un paso al costado para hacerlos quedar como héroes. Pero Sony respondió lo siguiente: “Todavía ninguna compañía logró explicarnos qué beneficios le daría a PlayStation incorporar cross-play”. El final ya lo conocemos, terminaron cediendo.
https://twitter.com/tomwarren/status/1389259771354681348
Pero los mails filtrados no terminan ahí, porque el mejor es, por escándalo, el que filtró Mark Gurman y que intercambiaron los mandamases de ambas empresas en conflicto.
Resulta que en 2015, Tim Sweeney (dueño mayoritario de Epic), le mandó un mail a Tim Cook (CEO Apple) para pedirle que la App Store sea un poco más flexible. Pero Cook no solo parece no haberle respondido, sino que le reenvió el mail a sus compañeros con el texto: «¿Y este quién es?». Maravilloso.
Lo que deja en claro, entre otras cosas, que estamos ante gente sumamente poderosa disputándose más poder. Durante las tres semanas de juicio culminadas a finales de mayo, el medio Gamesindustry se encargó de resumir lo que iba sucediendo y entrevistando a profesionales conocedores de temas legales e, incluso, a partícipes de la disputa.
https://twitter.com/markgurman/status/1389655292850237441
La idea era que los diferentes actores fueran contando cómo venía el asunto, qué decía cada empresa para defenderse y, además, recibir una interpretación de los hechos. ¿Ganará Epic y todo el organigrama digital volará por los aires? ¿Ganará Apple y luego habrá que esperar para ver qué pasa con Google del que nadie habla?
«El caso podría tener serias ramificaciones para otros ecosistemas, como los operados por Nintendo, PlayStation y Xbox», afirmó la jueza González Rogers. Y David Hoppe, fundador del bufet de abogados de San Francisco, Gamma Law, agregó en Games Industry: «Si Epic gana pondría en duda la premisa básica del negocio de contenido digital que ha evolucionado durante 20 años«.
Claro, es que según Hoppe, Epic tiene un buen punto: «Si lo piensan bien, no es obvio que la empresa que fabrica el dispositivo físico deba tener la capacidad de controlar a qué contenido accedes», profundiza el abogado con el medio especializado en temas de industria. Que, además, entiende que aunque no gane Epic este juicio, el modelo de negocios actual, eventualmente, terminará cayendo.
Y parece que Algelo Alcid, también abogado en el tema, opina de forma muy similar: «Durante mucho tiempo, la reducción del 30% de todo parecía inflexible. A medida que surgen más y más alternativas, se es difícil para estos poseedores de plataformas justificar ese recorte. Y creo que cada vez veremos más estos cambios, ya sea voluntariamente, como en el caso de Epic, Microsoft, etc., o por la fuerza de la ley«.
https://twitter.com/FortniteGame/status/1293994211621167105
Sin embargo a Richard Hoeg, otro de los abogados entrevistados por Games Industry, ese porcentaje no le parece una locura porque siente que Apple demostró que si bien muchos desarrolladores entienden que cobran comisiones altas, también es verdad que ofrecen una propuesta de valor que las justifica.
«Es similar a la forma en que Walmart maneja a los proveedores. Walmart usa su poder de mercado para bajar los precios al por mayor, pero debido a su alcance al consumidor, los proveedores aún se suman. Pierden dinero en cada venta, pero lo recuperan en volumen. Así que espero que veamos una decisión para Apple, pero tal vez con algunas condiciones como si tuvieran que empezar a permitir que los desarrolladores informen a los clientes de iOS sobre alternativas de compra fuera de iOS», sostuvo el profesional de Michigan.
Aunque también aclaró que en varias oportunidades defendió clientes contra Apple por aplicaciones infractoras, pero la empresa siempre se negó a bajarlas y bloqueó de la App Store a aquellos que se atreven a demandarlos. Lo que intentaron hacer con Unreal Engine, básicamente. «Eso parece un poder de monopolio de trabajo. Cuando una empresa puede actuar mal pero tiene tanto poder de mercado que la gente simplemente está indefensa, eso es un daño real para los desarrolladores y los consumidores«, afirma Hoeg.
Y concluye: «Mis sentimientos están claramente con Tim (CEO Epic). Sinceramente, creo que está tratando de representar los mejores intereses de los desarrolladores. Apple ha obtenido enormes beneficios con contenido creado por desarrolladores de aplicaciones en su plataforma y no hacen nada para servir o proteger sus intereses».
El Metaverso de Tim Sweeney
Si bien el juicio terminó y en este momento estamos en la etapa en la que se espera el veredicto de la jueza a cargo, durante la primera semana en el estrado de declarantes estuvo el propio Tim Sweeney, CEO de Epic Games. Y en su discurso se encargó de aclarar que ya no considera a Fortnite como un videojuego, sino como un Metaverso. Un argumento que entendió relevante para dicho proceso.
«La evolución a largo plazo abrirá Fortnite como una plataforma para que los creadores distribuyan su trabajo a los usuarios, y los creadores obtendrán la mayoría de las ganancias», dijo Tim. Y agregó: «Con Apple tomando un 30% de las ganancias, es muy difícil para Epic y los creadores existir en este mundo futuro«.
Claro, Sweeney tiene un gran punto. Desde hace mucho tiempo se viene discutiendo el porcentaje que se llevan las grandes tiendas, y con razón. Pero insisto, lo que parece un poco fuera de lugar es que Epic tenga como argumento contra Apple el monopolio.
El que no tenga ningún pecado…
Desde la creación de la Epic Games Store, la tienda regala videojuegos todos los meses, lo que le cuesta poco más de 10 millones de dólares semanales, y le paga a estudios grandes, medianos y pequeños para que sus obras salgan con ellos de forma exclusiva en PC (a Borderlands le pusieron 146 millones de dólares). El objetivo lógico es ganarle mercado a Steam, que es casi sinónimo de PC y tiene precios localizados en todo el planeta. Uno diría: «Opa, en este terreno también lucha contra un monopolio…»
Pero, pero, pero… al mismo tiempo le vendió el 40% de sus acciones a los chinos de Tencent, que en su país tiene unas cuantas acusaciones fundadas de monopolio y ya son dueños de Riot (League of Legends), Leyou (Warframe), tienen el 84% de acciones de Supercell (Clash of Clans y Clash Royale), e incluso el 5% de Ubisoft (Assassin’s Creed), Activision/Blizzard (Call of Duty, Overwatch) y Paradox Games (Stellaris). Lo que no llamaríamos precisamente una sociedad de fomento y una lucha antimonopólica. ¿No les parece?
Es tal el empuje que recibió Epic con esta venta y la explosión monumental de Fortnite, que hasta la reacia Sony invirtió un par de miles de millones en la empresa. Dejando atrás un pasado de disputas por el crossplay y el intercambio para nada amistoso con Sweeney que se les filtró estas semanas.
- Es más del triple de lo que recaudó Avatar, la película más taquillera de la historia.
- Por esa plata, Epic podría haber comprado Marvel dos veces.
- Es más de lo que pagó Microsoft para comprar ZeniMax Media (7,5 mil millones).
- Toda la industria nacional argentina recaudó durante el 2018 el 1,4% de lo que facturó Fortnite ese mismo año (según los datos del observatorio de la UNRaf y ADVA).
Lo cierto es que podemos seguir hablando del juicio Epic vs Apple durante infinitas líneas, elucubrar eternamente y relacionarlo a temas políticos, económicos y de poder, pero la realidad es que acá está en juego un modelo de negocio que parecía estar muy cómodo. Un modelo que hasta el momento se quedaba con el 30% del dinero recaudado por los desarrolladores de aplicaciones y videojuegos, pero que lentamente está cambiando. Y, nobleza obliga, gracias a la presión que está ejerciendo Epic Games.
Horizontes
Por el momento, no sabemos que harán los japoneses de Nintendo y PlayStation, pero por el lado de Microsoft en las últimas semanas se encargaron de comunicar que a partir de agosto pasarán a recibir sólo un 18% de las ganancias de los juegos que se venden en la versión de PC de su store. Aunque no así en consolas.
¿Por qué esta diferenciación? Bueno, el por qué para las del país del sol naciente no lo sabemos a ciencia cierta, pero el caso de Xbox quedó muy claro también en el juicio Epic vs Apple. Ya que Lori Wright, vicepresidenta de juegos, medios y entretenimiento de Microsoft, confirmó que la compañía no obtiene y nunca ha obtenido ganancias de las ventas de sus consolas, pero agregó que los ingresos por suscripciones y comisiones por ventas digitales, un recorte del 30%, al igual que Apple, compensa esto.
https://twitter.com/stephentotilo/status/1394618302475931649
Una ganancia que podría elevarse aún mucho más si lograran incorporar el excelente servicio Game Pass en Switch. Negociación que, según otras filtraciones relacionadas al juicio, ya se llevaron a cabo con Nintendo, aunque con resultados que también desconocemos.
¿En que quedará toda esta maraña de filtraciones, acusaciones y luchas de poder? Eso sólo está en la cabeza de la jueza estadounidense Yvonne González Rogers, ya que los especialistas en el tema no se ponen de acuerdo. Lo único que está claro es que si gana Epic, no sólo será un mini triunfo chino, sino que los efectos se desparramarán como en un efecto dominó y afectarán el negocio de otras grandes de la industria. Por lo que, desde mi humilde opinión, puede que el resultado termine del lado de la manzanita.
¿Ustedes qué creen? ¿El juicio de Epic vs Apple terminará teniendo repercusiones históricas, o quedará como una gran anécdota del mundo del gaming? En un tiempo lo veremos, y desde Press Over estaremos ahí para contarles todo y analizarlo juntos.
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¡Excelente artículo, Juan!
Gracias, Dan queridoooo! Un honor que te haya gustado a vos.