El corazón de la comunidad de cosplayers y fans latió con fuerza al enterarse de que en la séptima edición de Arte Cosplay, exhibición de fotografías y trajes que celebra la actividad artística de caracterizar a un personaje de ficción, todos iban a poder conocer en persona a Calssara y Elffi, la pareja de cosplayers más famosa del mundo.
“El evento prioriza sobre todo el trabajo de arte realizado por la comunidad cosplayer. Los cosplayers, nacionales e internacionales que se acercaron a la muestra, son los protagonistas del evento y por los cuales intento difundir esta actividad con el mayor de los respetos”, expresó Fernando Brischetto, principal responsable del evento y fotógrafo que alguna vez había logrado capturar a los invitados de honor en uno de sus viajes al exterior.
“Arte Cosplay estuvo genial. Fernando es una persona muy agradable. Nos trató de la mejor manera posible, encargándose de todos los detalles. La experiencia dentro del evento fue en verdad muy relajada y estamos muy agradecidos por lo vivido”, expresó con su característica humildad y honestidad Elffi, al finalizar la muestra que se llevó a cabo en el icónico Jardín Japonés y a la que asistieron cientos de cosplayers, fanáticos, fotógrafos especializados en cosplay y prensa especializada.
Más que un cronograma
La jornada del sábado 24 de noviembre comenzó con una sesión de preguntas y respuestas a los invitados internacionales, donde Bel (así es el nombre de pila de Calssara) comentó que, además de ser cosplayer, también es fotógrafa de cosplayers. Y que cuida de sus retratados manteniendo conversaciones fluidas con los modelos para que no sólo se vean hermosos, sino que también se “sientan hermosos”.
Además, mencionaron que viven juntos desde hace un año en Alemania y que eso les permite ayudarse entre ellos al momento de hacer cosplay.
Elffi es el que, en general, da una mano a Calssara en armaduras y accesorios, y Calssara es la experta en costura. “Puede ser una desventaja tener a dos cosplayers viviendo en una misma casa, porque hay el doble de desorden”, bromeó la pareja.
Para ella, el cosplay (que la tuvo como campeona europea, después de 6 meses de trabajo incasable en un solo traje) es un hobby y no su ocupación principal. Es bibliotecaria y está muy feliz. Incluso logró sumar a la biblioteca donde trabaja un pequeño taller de costura, con máquinas de coser para dar clases.
Elffi, por otro lado, volvió al cosplay de la mano de Arte Cosplay, ya que el último año estuvo muy ocupado. Se recibió de las carreras que estaba estudiando en su Filandia natal (Relaciones Internacionales y Estudios de Japón), se mudó de país y trabaja como Administrador IT full-time.
“Hacemos teams de cosplay cuando coincidimos en gustos”, aclaró Calssara, con énfasis en la idea de que cosplayear a un personaje tiene sentido si te sentís identificado con lo que vas a representar, ya que su realización conlleva dinero y esfuerzo. “Si voy a elaborar algo, lo voy a hacer con lujo de detalles, independientemente de que la gente que lo vea, porque yo los noto y me gusta estar satisfecha conmigo misma”, aseguró.
Y a continuación le recordaron aquella vez que le tocó enfrentar con entereza los comentarios negativos de hombres en sus redes sociales por subir una foto en donde se veían algunas estrías naturales a las que ella no les había prestado atención. “Concentrémonos en lo positivo como comunidad y apoyémonos mutuamente”, expresó la alemana eligiendo ver el vaso medio lleno de este tipo de hechos desafortunados.
Finalizado el Q and A en el salón de conferencias, la agenda del evento continuó en la carpa verde. Allí se encontraba montada la exposición de fotografías de cosplay de Brischetto que son el resultado de un año intenso de coberturas de convenciones nacionales e internacionales, más sesiones de fotos especiales que el fotógrafo realiza por placer con cosplayers seleccionados en privado.
Estas tomas bien logradas por el administrador de Cure WorldCosplay OS LatinAmerica, con uso de perspectiva cinematográfica, edición ligera e iluminación certera, se encontraban impresas en papel ilustración y resaltaban en los paneles blancos. Mientras algunos apreciaban la muestra que esta vez no presentó trajes como ediciones anteriores, otros, que habían viajado desde otras provincias y otros países de Latinoamérica, hacían cola para comprar prints autografiados de sus ídolos.
Cuando llegó la hora, todos se reunieron para escuchar la voz autorizada de Elffi, que en realidad es el nombre artístico de Janne Hemminki Rusanen. El cosplayer de 31 años, ganador de la WorldCosplay Cup, y creador de más de 40 trajes desde el 2006 para acá, desterró falsas creencias y excusas a la hora de alimentarse bien y entrenarse y se centró en demostrar que con poco se puede lograr mucho.
Por ejemplo, tener un cuerpo bronceado y tonificado antes de una convención es posible si el hombre en cuestión se afeita, se coloca auto bronceante y se maquilla los abdominales. Otra zona en donde se puede aplicar maquillaje es en la cara para acentuar los rasgos del personaje elegido a la par de dar marco a los lentes de contacto con delineador y rimmel. El clásico: “meté panza para la foto” es una recomendación fundamental de Elffi, que tuvo un trato genuino hacia los que querían aprender de él y le brindó inspiración a quienes buscan motivación a la hora de encarar un proyecto personal.
El costado gamer de Calssara y Elffi
Entre actividades, el gamer de ley Brischetto de CD Market buscó un momento para que la que escribe pudiera ponerse al día con Elffi. Con su mejor predisposición, el elfo filandés, tal como lo había apodado en su momento, contestó preguntas en exclusiva.
. A los lectores les gustará saber que sos gamer como ellos. ¿Cuáles son tus videojuegos preferidos?
¡Tenés que hablar con mi novia! Ella es más gamer que yo y ama Final Fantasy. Yo solía jugar con mi computadora en Filandia con mi cuenta de Steam. Pero este último año no he tenido la oportunidad de empezar ningún título. En general, solían entretenerme los videojuegos multi-jugador como Overwatch, en donde podemos matarnos entre nosotros -dice con una sonrisa socarrona-. También los videojuegos de rol como Diablo. Lo que sí he hecho es ver Netflix con Bel y ¡lo hemos visto casi todo! La nueva serie de Sabrina está muy buena y estamos siguiendo The Sinner capítulo a capítulo–(NdE: ¡Aguante!).
. ¿Qué es lo que a tu consideración te hace especial en la escena de cosplay?
No lo sé. Solo hago lo que me gusta hacer. El éxito es otro tema. Es complejo y difícil de conseguir y medir. Tienen que darse una serie de factores que no siempre se dan.Tiene que ver con la suerte, con el lugar en el que vivís, tus habilidades y cómo crecen, las personas que conocés, etc. El cosplay es diversión para mí. Es un hobby y como tal, si no lo disfrutara más, simplemente dejaría de hacerlo.
. ¿Seguís tomando cerveza y haciendo maratones sin dormir a la hora de crear tus trajes?
No, hace 366 días que estoy libre de alcohol y cigarrillo -menciona orgulloso-. Esa es una de las razones por las cuales perdí peso.
. ¿Qué diferencias hay entonces en el Janne del pasado y el Janne de ahora?
Estoy más viejo. Antes salía mucho y vivía el día a día, y podía hacer cosplay con mucha más frecuencia que ahora. Hoy puedo decir que después de recibirme de mis carreras senté cabeza con mi novia. Nuestra convivencia cambió todo y para bien. Mis metas no son las mismas y tampoco pienso que puedo hacer cosplay para siempre. Me encantaría ahorrar y comprar una casa.
. ¿Te gustaría tener un hijo con Bel (Calssara)?
No, la verdad es que no pienso en tener chicos ahora -se ríe y desvía la mirada- No sé si querré alguna vez.
¿Calssara fantaseará con formar una familia? Es una pregunta abierta, sin dudas. Lo que sí se puede afirmar es que luego de un merecido paseo por el Jardín Japonés con el cual estaba fascinada, mencionó que estaba muy entusiasmada porque había podido adquirir una Nintendo Switch y había pasado todo el viaje de ida a Argentina jugando al Super Mario Odyssey, su video juego preferido del momento.