Si todos tus amigos en redes sociales de repente están compartiendo sus éxitos en “Wordle” y vos queres meterte a la joda, hacelo sin miedo. No hay blockchain, NFT (Non Functioning Testicles), ni estafa piramidal involucrada.
Wordle, hablando sencillo, es el nuevo videojuego online casual que se ha viralizado y como muchos de esos otros, su éxito se debe en gran medida a su enorme sencillez y a la manija que genera que solo se pueda jugar UNA VEZ POR DÍA y no te deje jugar los desafíos anteriores. Solo hay mañana.
Las Reglas
Antes de empezar, anoticiarles que hace apenas unos días surgió una versión en español del videojuego desarrollada por un programador colombiano, Daniel Rodriguez, del cual dejo link aquí y que comparte absolutamente todas las reglas con el original.
Apenas entramos por primera vez a la página de Wordle nos muestra sus tres sencillas reglas con el objetivo a conseguir:
Objetivo: Adivinar cuál es la palabra de cinco letras en seis intentos o menos. No hay ninguna bonificación por adivinar la palabra en menos oportunidades.
Para hacerlo no hay ninguna pista. Tenemos que adivinar desde cero. Sin embargo, se nos ayudara a través de las letras, las cuales el juego, a lo largo de los intentos, nos dirá si están o no en la palabra (casillero amarillo si están, casillero gris si no) e incluso si la colocamos en la posición correcta (casillero verde). Una pequeña triquiñuela es que no se nos refleja si se repiten dentro de los cinco caracteres. Interesante dificultad agregada.
Lógicamente, Wordle original gana en complejidad si no manejamos un inglés experto porque aunque a veces toca alguna palabra mas común, no suele ser la norma.
Estrategias
Si se lo mira con cariño, Wordle no es ni mas ni menos que un Ahorcado con pasos extra. Hay que, en definitiva, adivinar un término del cual tenemos un solo dato: la cantidad de letras y la cantidad de intentos. Casi tacharía lo de pasos extra.
A priori puede parecer muy complicado si no lo analizamos con ese criterio en mente. Pero una vez que descubrimos las enormes similitudes con ese clásico juego para todas las edades, las tácticas quedan relativamente evidentes pero como para gustos, colores, seguramente todos tengan variaciones.
La principal suele ser que la primera palabra sea una nutrida de vocales. Tres es lo ideal. La segunda palabra de alguna manera tiene que incluir las otras dos vocales que faltasen (nunca olvidando lo problemática que es esa Y griega) y consonantes comunes en el inglés como “R”, “S” y “T”. De acuerdo a los resultados que nos ofrezca Wordle se continúa la búsqueda que puede o no ser un auténtico salto de fe.
De momento y dado que es la misma palabra para toda la humanidad, nadie ha roto el tácito contrato social y nunca (o al menos yo no lo he visto) se reveló la palabra del día. Estamos todos en una comunión de fans mostrando nuestros resultados y dándonos gratuitos abrazos virtuales por el logro obtenido.
Historia
Josh Wardle, y rápidamente notarán el apellido, es un ingeniero de software que supo trabajar en Reddit y, confinado por la pandemia, decidió inventar este fichín casual para divertirse con su pareja, fanática de los crucigramas. Con el tiempo, sus familiares se obsesionaron y así fue que Wardle decidió que tal vez, al mundo también le gustaría viciarlo (viciar es un decir PORQUE SOLO SE PUEDE JUGAR UNA VEZ POR DÍA ME VUELVO LOCO WARDLE DEJATE DE JODER) y por eso lo subió a internet a una web en la cual no hay publicidad o inicio de sesión. En solo unas semanas, Wordle ya era una obsesión.
En entrevistas recientes, Wardle, ha relatado de proyectos personales previos con acercamientos a Wordle, comentando incluso sobre un desarrollo muy parecido hace casi una década pero que no logró atraer la atención de nadie. Sin embargo, el click solo pudo darse durante la cuarentena, cuando a “LA IDEA” le sumó “EL CORAZÓN”. Su pareja, Palak Shah, fue quien se encargó de eliminar mas de 8000 palabras del catálogo de Wordle para evitar que surjan palabras como “GLEBA”. De alguna forma, terminó siendo una creación de ambos.
Y otro poco de Historia
Los juegos de palabra siempre fascinaron a una buena parte de la sociedad. El Ahorcado es probablemente uno de los mas famosos de una numerosa lista que incluye a las Sopas de Letras, los Crucigramas, las Grillas, los Autodefinidos, e incluso juegos de mesa como el Boogle y el Scrabble.
Una de las primeras razones de popularidad mundial de Facebook fue su sección de videojuegos casuales. Entre aquella primera camada de Mob Wars, Geo Challenge y alguno mas, aparecía uno que jugaba todo aquel con una cuenta en el 2008 y se llamaba “Word Challenge”.
Ahora bien, no es mi intención que piensen que Wordle y Word Challenge son en alguna manera parecidos. Lo único que comparten a nivel gameplay es que hay que armar o descubrir palabras. La relación que hago entre ambos títulos casuales es que no recuerdo en el medio una entrega de esa clase de características que se haya viralizado de forma tan automática y brutal.
Podemos determinar que no es necesario que un videojuego (o juego en sí) sea fácil de entender para que sea popular, pero ayuda sin duda y a nivel casual es una tendencia aún más clara de ver.
Gratuito, cómodo de comprender, divertido, y te deja con ganas de más.
La fórmula infalible.
Si llegaste hasta acá y te gusta lo que hacemos en Press Over, medio independiente hecho en Argentina, siempre nos podés apoyar desde la plataforma de financiación Cafecito. Con un mínimo aporte nos ayudás no sólo con gastos corrientes, sino también con la alegría de saber que estás del otro lado.