A veces nos sentamos a jugar a algo con nuestros celulares y ni siquiera nos preguntamos adónde fue desarrollado. Para nuestra sorpresa, la respuesta muchas veces sería «en Argentina». Eso ocurre, por ejemplo, con Peanuts: Snoopy’s Town Tale, Garfield: Survival of the Fattest y Goosebumps HorrorTown, creados por el estudio Pixowl, con base en Buenos Aires.
Animoca Brands acaba de adquirir Pixowl por casi cinco millones de dólares (4,875 si queremos ser exactos) en efectivo y acciones. De ese monto, USD $519.512 son en efectivo mientras que el resto es en acciones de Animoca Brands, empresa con base en Hong Kong que se dedica a crear juegos basados en propiedades intelectuales populares. También, son el distribuidor exclusivo en China de CryptoKitties.
Pixowl tal vez sea principalmente reconocido por haber creado The Sandbox en 2012, un juego que funciona principalmente a partir del contenido que generan los usuarios. Entre todas sus versiones, acumula más de 40 millones de descargas, ubicándolo entre las plataformas basadas en contenido por usuarios más grandes del mundo.
El estudio está trabajando en una versión de The Sandbox que funciona a partir de blockchain, tal vez motivo principal para el interés de Animoca Brands. «Pixowl comparte nuestra visión del gaming con blockchain, de los NFT (criptomonedas) y de los juegos como plataforma«, dice Yat Siu, cofundador y director de Animoca Brands. «Esperamos aprovechar las muchas oportunidades de crecimiento que presenta esta adquisición.»
«Sentimos que el blockchain es la forma de que nuestros jugadores se puedan adueñar realmente del contenido que están creando«, agrega Arthur Madrid, CEO y fundador de Pixowl.
Como todos recordamos (y yo acabo de googlear), el blockchain es una herramienta de descentralización económica que ofrece transparencia y seguridad a las criptomonedas, como ocurre con el caso del Bitcoin o el Ethereum. Más simple y aplicado a este caso, los usuarios de The Sandbox podrían apropiarse y vender lo que creen dentro del juego.
Con oficinas principales en San Francisco y estudio de desarrollo en Buenos Aires, existe la posibilidad de que Pixowl ahora agregue oficinas en Hong Kong. Por lo menos, ya tienen un pie adentro.