Con una comunidad avida por saber más sobre el universo de Overwatch, Blizzard está continuamente expandiendo el canon de su franquicia con cortos animados, comics y novelas. Soldier 76.
El último ejemplo de esta estrategia transmedia es Bastet, una historia escrita por Michael Chu que revela algo que hasta ahora no sabíamos (aunque ya había pistas) de Jack “Soldier 76” Morrison: su orientación sexual.
La trama nos lleva a la ciudad de El Cairo, donde Ana se topa con el viejo soldado muy herido, y lo lleva hasta su escondite para que se refugie mientras sana. Es en un momento de descanso que la sniper ve a Soldier 76 revisando unas viejas fotos, en las que se lo puede ver junto a otro hombre, llamado Vincent.
La conversación entre ambos personajes nos permite saber que la relación terminó hace mucho, y que Morrison tuvo que terminarla por su labor en Overwatch.
Que Soldier 76 sea gay despertó sentimientos encontrados en la comunidad del juego, entre quienes recibieron con agrado la noticia y quienes insisten en que existe una agenda maliciosa detrás de este tipo de anuncios. Abajo les dejo un “hermoso” compilado de opiniones negativas, realizado por shiroi0015 en Twitter.
https://twitter.com/shiroi0015/status/1082457425297502208
Quienes acusan a Blizzard de realizar esta “maniobra forzada” por ser “políticamente correcta” simplemente no han prestado suficiente atención. En 2016, cuando gracias a un comic supimos que Tracer estaba en pareja con una mujer, Soldier 76 aparece en un cuadro, también junto a Ana, revisando la misma foto que aparece en Bastet.