Fue este martes 18 de Agosto, aunque el tweet ya no lo van a poder encontrar porque la gente de E3 lo borró. Básicamente se trataba de una publicación bajo el título: Gran lista de juegos que las mujeres gamer están jugando… ¿Alguno de tus favoritos está en la lista?. Y si bien la propuesta en sí misma no parecía ser nada agresiva ni negativa, hasta incluso por como estaba titulada podría suponerse que la información había sido recolectada de fuentes oficiales, resulta no hubo nada de esto.
Para sorpresa de todxs, sólo estaban compartiendo un artículo, a modo recomendación, escrito por el medio Parade (que, dicho sea de paso, también lo borró), en donde publicaban de manera arbitraria y sin ningún tipo de estadística cuáles eran los 25 juegos RECOMENDADOS para mujeres. Dentro de los cuales se incluían opciones estereotipadas y completamente discriminatorias como juegos de moda, cultura pop, cartas y otros similares.
Desde ya que no juzgamos a quienes elijan este tipo de juegos como sus favoritos, pero eso no quita que la elección subjetiva de los mismos está poniendo a la mujer en el lugar del que muchas de nosotras estamos tratando de corrernos: no queremos barbies y romance. Y si algunas de nosotras sí, no piensen que es algo generalizado.
Dentro de los títulos elegidos, los más destacados como estereotipo eran: Candy Crush, Kim Kardashian: Hollywood Adventures, Solitario, otros juegos mobile, y la parte más triste es que el que encabezaba la lista era el Sudoku. Lógicamente, a los pocos minutos más de 6 mil personas, muchas de ellas mujeres, explotaron en las redes sociales quejándose y burlándose de cómo se nos posiciona en el target de «casuals». Otro símbolo social de lo mucho que nos falta avanzar para entender un poco más sobre igualdad.
https://twitter.com/E3/status/1295806965894074368
La buena noticia es que por suerte E3 salió a pedir disculpas por lo ocurrido borró el posteo y dijo lo siguiente: “Nos equivocamos. Vamos a bajar el post y pedimos disculpas por perpetuar un estereotipo dañino. Vamos a mejorar”.
¿Cuál podría ser el primer paso? Incorporar al equipo representantes de todas las diversidades, personas que podrían detectar estos errores antes de publicarlos. Y, además, involucrar a más mujeres en una industria llena de posibilidades donde nosotras también podemos disfrutar de títulos de tiros, estrategia y temáticas erróneamente consideradas exclusivas de varones.
