Después de casi un año de conflicto en Riot Games, el Estado norteamericano decidió tomar cartas en el asunto a través del DFEH (Departamento de Empleo Justo y Vivienda, en castellano) californiano, agencia encargada de que las empresas respeten los derechos civiles.
La oficina solicitó a la corte estatal que exija al estudio la entrega de información salarial sobre sus empleados, necesarios para continuar una investigación sobre posible discriminación de género. Pero su trabajo no se limita a diferencias salariales. También están investigando acusaciones de acoso sexual, agresión sexual, represalias y discriminación de género en las selecciones y ascensos.
La investigación lleva ya varios meses, pero se hizo pública recién ahora gracias a un comunicado del propio DFEH, en el que denuncia la negativa de Riot Games a presentar la documentación que le fue requerida. Solicitar la intervención de la corte es el paso previo a iniciar una demanda.
Desde Riot se mostraron sorprendidos por la decisión del DFEH, y a través de un mensaje que fue recibido por Kotaku, insisten en que no han hecho más que colaborar con la agencia. Pueden leer el texto a continuación:
«Hemos estado en conversaciones activas con el DFEH desde que comenzó su investigación. Investigaciones como esta pueden surgir cuando ha habido denuncias de disparidad en el lugar de trabajo y hemos estado cooperando de buena fe con el DFEH para abordar sus inquietudes. Durante este tiempo, hemos respondido rápidamente a las solicitudes de la DFEH y hemos producido más de 2,500 páginas de documentos y varios miles de líneas de datos de pago hasta el momento. También hemos realizado varias solicitudes recientes para que el DFEH participe en una llamada con nosotros para atender sus solicitudes. Hasta la fecha, estas solicitudes no han recibido respuesta, por lo que nos sentimos francamente decepcionados al ver que el DFEH emite un comunicado de prensa en el que se afirma que no hemos cooperado. Estamos seguros de que hemos logrado un progreso sustancial en diversidad, inclusión y cultura de la empresa, y esperamos seguir demostrando esto a la DFEH».
Habría que ver si los empleados de Riot comparten lo dicho por parte del estudio. Recordemos que hace mes y medio se realizó un paro histórico en todas las oficinas de la empresa en protesta por las maniobras legales que el estudio estaba realizando para bloquear y anular algunas de las demandas por discriminación de género iniciadas por empleados y ex empleados.
Los huelguistas exigían además que el estudio desistiese de, al momento de la contratación, obligar a su personal a firmar una clausula que les impide justamente demandar a Riot. Para sorpresa de nadie, y pese a sus promesas de mejorar, la empresa hizo oídos sordos a la petición.