A comienzos de noviembre tuvimos el honor de recibir en nuestro podcast Early Access nada menos que a la Bersuit. Una de las bandas más importantes de la historia del rock nacional estaba preparando un videojuego para el lanzamiento de su nuevo disco, y llegaba para contarnos todo junto a la Cooperativa El Faro, equipo encargado de su desarrollo
La charla fue super rica, porque no sólo se habló de la concepción del videojuego (del que participó como animadora Mer Grazzini) y de anécdotas históricas de la banda, sino que se profundizó sobre la relación de ellos con el juego como concepto.
¿Son jugadores? ¿Jugaban videojuegos de chicos? Preguntas por las que pudimos enterarnos del fanatismo de Juan Subirá (tecladista y autor) y Carlos Martín (baterista y autor) por el TEG en su adolescencia, y el posterior desarrollo casero de un TEG 2. De cuando jugaban PONG juntos, y hasta el gusto de Subirá por la música de los videojuegos actuales que consumen sus hijos.
Cómo pasa con la de The Last of Us, compuesta por el argentino Gustavo Santaolalla, ex productor de cuatro discos de Bersuit y de innumerable bandas latinoamericanas.
Será por todos estos vínculos que la banda decidió aceptar la idea de un videojuego, propuesta por su manager Cristian Merchot, e incluso usarlo como fondo para su nuevo videoclip. Pero también por la comunión que se generó en los últimos años entre cooperativas.
Durante el gobierno anterior, hubo una fuerte corriente cooperativista. Bersuit, Nonpalidece, La Delio Valdés y varios grupos más se convirtieron en cooperativas y, con esa transformación, comenzaron a colaborar y crear sinergia con otras.
Una de ellas fue El Faro, uno de los pocos estudios de videojuegos que se crearon con esa visión, y el encargado de llevar adelante el desarrollo del videojuego de la Bersuit.
Cocoliche Life, se estrenó el 6 de enero junto al nuevo disco del mismo nombre, y nos pone en la piel de un pajarito en un mundo en ruinas azotado por el cambio climático generado por la humanidad. Por lo que deberemos conducirlo por el aire mientras esquivamos contaminación, recogemos notas musicales, y escuchamos parte del nuevo disco.
«Es un videoclip jugable«, dijeron desde El Faro durante la entrevista en Early Access. Y no podría ser una definición más acertadas.
Cocoliche Life fue pensado para infancias, para los hijos e hijas de esos fans de Bersuit de toda la vida. Por eso, y también por los tiempos de desarrollo, la sencillez de su gameplay.
El vuelo del pájaro, animal muy presente en la poesía bersuitera y en este nuevo disco, se divide en tres carriles, y con las flechas del teclado o la pantalla táctil del teléfono, deberemos conducirlo hasta el final de su viaje. Siempre mientras escuchamos temas como Víctimas, Decime u otros estrenos.
Un videojuego simple pero bello, que ya se puede jugar online, o descargar para PC, celulares y tablets desde la web oficial de Bersuit.