Steam actualiza sus precios regionales ¿Hay que preocuparse?

El 25 de octubre de 2022 Steam actualizó su política de precios. En particular, los precios sugeridos para Argentina aumentaron cerca de un 500%. El valor recomendado para juegos de $1 USD pasa de $13,99 a $82 ¿Steam recomienda valores para distintos precios, no una tabla de conversión directa?  ¿Quiere decir esto que el precio de los juegos va a multiplicarse de un momento a otro? Bueno… ¿tal vez? La respuesta no es del todo clara. Algunos sí, otros no.

Lo primero a tener en cuenta es que Steam no pone los precios. Los ponen los publishers. Steam lo que ofrece es una guía de precios para distintas regiones, que los publishers pueden aceptar o no. No es que hay un “Dolar Steam” oficial que todo el mundo debe acatar (esta es una importante aclaración, porque estuvo dando vueltas un rumor de que era así y no es cierto).

En muchos casos, lo que sucede es que un título se lanza a un precio en pesos, y después de unos años se vuelve irrisorio. Pero ojo, los publishers siempre tuvieron la posibilidad de aumentar ese precio.

Steam has updated their recommended prices for game developers, we have a list of all the changes in a new blog post: https://t.co/9BQ6YKgYfG

— SteamDB (@SteamDB) October 25, 2022

Un buen ejemplo es comparar los precios sin descuento de series anualizadas: FIFA pasó su precio de lista de $3600 para la edición 2021, a $5500 para el 2022, para llegar a $11500 en 2023. A EA no le hizo falta esperar a que Valve recordara actualizar su “dólar oficial”.

¿Por qué no actualizan los precios los publishers? En algunos casos tal vez sea simple desidia. Sobre todo editoras chicas que no tienen un equipo de marketing coordinando precios en todas las regiones.

Pero hay otro punto: Para garantizar lealtad comercial, Steam no permite hacer descuentos de un título por 28 días después de un aumento de precio en cualquier moneda. Actualizar el precio en pesos ata de pies y manos a cualquier estrategia de promoción en el resto del planeta. Esto era cierto antes y sigue siéndolo ahora.

Por eso mismo es que la propia Valve recomienda a los publishers esperar a actualizar sus precios después de una promoción. Teniendo en cuenta que justo estamos en temporada de descuentos hasta fin de año (primero por Halloween, luego el sale de otoño, luego el de invierno), es posible que muchos títulos tarden en actualizarse.

De hecho, esto no es nuevo. Lo mismo sucedió con Dead Cells, que aumentó sus precios en Turquía y Argentina en agosto pasado justo después de su último descuento:

Entonces: ¿van a aumentar TODOS los juegos? Sospecho que no, por un motivo muy sencillo: Steam no es todo el mercado. Publishers grandes como EA o Ubisoft tienen sus propias tiendas, y los precios suelen ser similares a los de Steam (y a veces incluso más baratos). Si estos editores  quisieran aumentar locamente el precio de sus juegos de catálogo, ya lo hubieran hecho, tanto en Steam como en sus propias plataformas. Los juegos nuevos, como vimos, se lanzan a precios actualizados.

Por el lado de los indies, los publishers más grandes como Devolver, Annapurna o Team 17 tampoco respetaban hace rato la recomendación del “dolar a $14” que recomendaba Valve. Los lanzamientos de este año están en torno a los $1000 a $2000, con lo que es poco esperable que aumenten. Y también está la otra ancla para los precios: los servicios de suscripción, que permiten acceder a enormes catálogos por valores accesibles.

Con todo, es posible que haya aumentos, sobre todo en títulos obscenamente baratos. La propia Valve ya aumentó los precios de lista de su catálogo de $129 a $765 para juegos como Half Life 2 o Portal (su valor de referencia para títulos de $9.99 USD). Si bien es un cimbronazo fuerte, también es cierto que estaban muy desactualizados y no es un precio prohibitivo para un clásico.

Así que sí, Steam actualizó sus valores atrasadísimos, y algunos juegos aumentaron como consecuencia. Pero en muchos casos es un mero blanqueo de una medida que ya habían tomado los propios desarrolladores y que no debería impactar en lo inmediato. Dicho esto, si algo de tu wishlist está en oferta a un valor ridículo, tal vez sea el momento de aprovecharla.

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