A medida que nosotros continuamos alimentando a las plataformas más grandes con nuestra información personal y privada, ellas se vuelven más grandes y a la vez más tentadoras para quienes buscan obtener información ajena. La filtración de datos de usuarios le ocurrió a PlayStation, le ocurrió a Spotify, y hace unos años también a Steam mismo. Es por eso que Valve ahora se encargó de tomar medidas para evitarlo: ahora, contrata hackers.
Sí, así como suena. Una película mala donde sólo pueden detener al ladrón de joyas llamando a otro ladrón de joyas. La realidad es que es una práctica más común de lo que pensamos, y se suele llevar a cabo con los llamados White Hat hackers (hackers de sombrero blanco). Se trata de gente que puede quebrar código, pero que «usa sus poderes para el bien».
Con esta nueva iniciativa, ofreciendo recompensas a partir de los errores encontrados, Valve espera solucionar fallas de seguridad (y proteger la privacidad de sus usuarios) tanto en su la plataforma de Steam, en la aplicación para dispositivos móviles y también en juego desarrollados por Valve mismo.
Valve también pidió a los hackers que no se entusiasmaran tanto con sus técnicas. Si buscando fallas llegan a romper Steam, dudo que la situación sea para reírse.