Después de pasarse alrededor de tres meses flotando en el aire, escupiendo portales por todo el escenario, tirando pedazos de su estructura por el suelo y repartiendo una monstruosidad de zombies, el Cubo de Fortnite explotó.
Con esto se cierra una de las etapas más interesantes desde que el juego de Epic fuese lanzado, pero comienza otra. La explosión, que el estudio anticipó invitando a todos los jugadores a estar presentes en el campo de batalla a 15hs (hora Arg.) de ayer, absorvió y transportó a los presentas a una dimensión flashera, onda Nirvana futurista con mariposas de energía y mucha luz, para luego arrojarlos al nuevo mapa de Fortnite, que incluye una nueva isla dentro del Loot Lake.
Para quienes no pudieron vivirlo, arriba les dejo el video capturado por el equipo de PC Gamer.